Una auténtica vergüenza de empresa. Como autónoma y emprendedora confié en enviar uno de los paquetes para mi primera campaña y ahí empezó mi infierno. 3500€ de ropa de alta costura tirados a la basura por su pésima gestión. Su solución: decir que se ha perdido. ¿En serio? Control cero, un año enviado de todo para gestionar un reembolso que nunca existió. A partir de este momento, ninguno de mis clientes utiliza esta empresa y en toda mi vida profesional mi objetivo es que la gente vea la ínfima calidad de profesionalidad que tienen. Os deseo como mínimo que paséis por lo que yo he pasado, y que el karma con la persona que se ha quedado con las obras de arte haga lo que se merece.
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